Primeras transformaciones urbanísticas

Primeras transformaciones urbanísticas

Plaza del Ayuntamiento

Primeras transformaciones urbanísticas de la antigua plaza de San Francisco tras la demolición de su histórico convento

En artículos anteriores ya hemos visto, como el jardín conventual de San Francisco, había sido en gran parte desbastado y sus árboles talados, al tiempo que todo el recinto quedaba allanado y franqueado por cuantos, en sus alrededores, transitaban, tras el completo derribo de sus tapias.

El jardín de los frailes se fue transformando, aunque poco a poco, en parque público a costa del municipio.

Estos fueron en realidad los primeros pasos que se dieron para que, de alguna manera, fuera configurándose la futura gran plaza mayor de Valencia cuyo rótulo, ya secular, de San Francisco, todavía no había sido alterado.

Sin embargo, el espacio urbano que, evidentemente, tras la demolición del edificio conventual e iglesia de San Francisco se había agrandado, no acababa de ser algo más que lugares propicios para la instalación de barracones de ferias, circos y magnífica plataforma para toda clase de improvisaciones y sitio adecuado para charlatanes.

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Primeras transformaciones urbanísticas de la antigua plaza de San Francisco tras la demolición de su histórico convento

Mientras tanto, el proyectado parque municipal se iba configurando en un nuevo jardín que venía a completarse con los escasos ejemplares de árboles longevos que todavía restaban de San Francisco y las nuevas aportaciones de la municipalidad.

Como en la mente del pueblo valenciano perduraba, profundamente arraigada, la imagen y nombre del convento de San Francisco, no obstante, desaparecida toda su fábrica, la antigua denominación permanecería en el recuerdo.

De modo que cuando finalizado el siglo, el Ayuntamiento acordó ampliar su sede consistorial y construir, en buena parte de esos terrenos, su monumental fachada principal, la gente, en su popular lenguaje, hablará “dels solars de Sant Francés”.

En cuanto al conjunto de calles que de alguna forma delimitaron el perímetro de la plaza de San Francisco, mencionaremos por cuestión de espacio a las más representativas, unas ya desaparecidas, como consecuencia de reiteradas reformas urbanas, otras sin embargo perviven todavía; los rótulos de otras calles colindantes harán referencia, como siempre suele suceder, al centro neurálgico de la zona, según es en este caso, el convento de San Francisco, aunque estas las trataremos más adelante.

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Primeras transformaciones urbanísticas de la antigua plaza de San Francisco tras la demolición de su histórico convento

Hacía los últimos años del siglo XIX, la plaza de San Francisco, que había recobrado su primitivo rótulo después de haber sido sustituido por otros, presentaba el aspecto que nos ofrece, en algunas láminas de archivo, con sus, aún nacientes, macizos ajardinados del recién configurado parque que tanto deseaban los valencianos.

En algunas fotografías, todavía se puede apreciar, las viejas casas del Barrio de Pescadores que se extendía desde la calle de las Barcas, Sagrario de San Francisco, Sangre, En Llop, Cotanda y Barcelonina, Bajada de San Francisco, etc.

Comenzaremos por el punto más inmediato a la fachada del convento de San Francisco, el rótulo más remoto que conocemos es el de la calle a la que hace mención Marcos Antonio de Orellana cuando dice “defront de la crehueta de Sant Francés”. A su vez, Orellana, como otros cornistas que siguen a él, hablan de la “Puerta de la Cruz de Sant Francisco, porque sobre su portal existe una pequeña cruz en un nicho”.

El especificar los autores este espacio concreto, lo hacen para distinguir esta puerta del convento de San Francisco que enfrentaba a la calle de las Barcas, de las demás puertas del mismo.

A propósito de esta Crehueta, mencionaremos una tradición que dice que frente a este espacio o en sus inmediaciones, se solía enterrar a los ajusticiados en la horca, procedentes de la “Casa del Pecat Mortal”, situada en la no muy distante carrer dels Transits.

La calle con la denominación más primitiva fue la que se conocía con el nombre de “Pont dels Anets”, que por estar junto al que fue Sagrario de San Francisco, recibiría también, posteriormente, este rótulo.

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Primeras transformaciones urbanísticas de la antigua plaza de San Francisco tras la demolición de su histórico convento

José Lop, autor de los más antiguos y versados en todo cuanto se refiere a la topografía de Valencia y en la que se apoyan los posteriores historiadores, se refiere a la calle del Pont dels Anets, dando a entender que discurre a lo largo de la tapia y fachada meridional del convento de San Francisco cuando nos dice:

“[…] al final de ella (de dicha fachada) e inmediato antes de salir a la calle Ruzafa, como igualmente antes de entrar en en la que se titula el Carrer Nou de Peixcadors, cruza una esquina […] esta acequia de Rovella que saliendo del huerto y atravesando la calle que hace como una plazuela va hacia la de Pescadores y el puente que cubre dicha acequia es el conocido como el Pont dels Anets […]”.

Probablemente, aquel antiguo nombre de la calle, debió recibirlo por las aves que nadarían en la acequia, situada a la entrada de un barrio cuyos habitantes eran, generalmente, pescadores del mar y de la Albufera.

Tal vez en el Pont dels Anets vendieran los pescadores, estas y otras aves, también es posible que allí acudieran los ánades por los marjales inmediatas hasta la acequia de Rovella.

No hay que olvidar, que según los documentos de la época hasta el año 1.356, en que por todos estos terrenos se proyectará el alzado de la nueva muralla, estos terrenos eran en gran parte pantanosos que se comunicaban con la Albufera y servían de refugio para las aves acuáticas.

Aunque los cronistas de Valencia hablan también de la calle de San Francisco como la que “va derechamente desde la plaza del mismo nombre hacia el puente vulgo de les Ánades por delante de la boca calle de la que se renombra de les Barques y de la Morera” sin embargo, el rótulo que más se consolidó y ha permanecido en el nomenclátor callejero de Valencia, fue el de la calle del Sagrario de San Francisco (como lo demuestran los antiguos anuncios publicitarios de la época de algunos de los muchos comercios en ella establecidos).

Esta calle del Sagrario de San Francisco respondía a la anteriormente se denominaba del Puente de los Ánades o Pont dels Anets en valenciano y cuyo rótulo permaneció hasta la gran reforma de la plaza de San Francisco en los comienzos del siglo XX y que desapareció totalmente absorbida por la amplitud vial del ensanche de la nueva plaza.

Uno de los motivos que llevó al derribo de las tapias del convento de San Francisco, obedecía a evitar, entre otros, el rodeo que tenían que dar los viandantes para transitar desde la calle de la Sangre a la de las Barcas.

Tan importantes vías urbanas y que tienen la particularidad de llegar con sus antiguos rótulos y similar topografía original hasta nuestros días, bien merece hacer un breve estudio sobre ellas.

Próximo capítulo: Topografía original del entorno

 

Fuentes consultadas:

Bibliografía

  • Origen e Historia de las calles del centro histórico de Valencia. Juan Luís Corbín Ferrer

  • España. Levante. Guías Calpe. Elías Tormo y Monzón. 1.923

  • Geografía del Reino de Valencia. José Martínez Aloy.

  • Valencia antigua y moderna. Marcos Antoni Orellana. 1.924

  • La urbe valenciana en el siglo XIV. José Rodrigo Pertegás. 1.924

  • Los restos del rey moro Zeyt, en el Monasterio de la Puridad de Valencia. José Benjamín Agulló Pascual. 1.978

  • Notas históricas de las Seráficas Provincias de Valencia (obra manuscrita). Padre Conrado Ángel

  • Valencia Antigua y Moderna. Constantí Llombart. 1.887

  • Origen y carácter de los acontecimientos de Valencia en la noche del 5 y del 6 de agosto de 1.835.

  • Las fiestas de la nobleza valenciana en el siglo XVII. Pilar Pedraza